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Algo fundamental para llegar a ser un campeón, bien sea en el deporte como en cualquier otra área de la vida es potencializar la mente y hacer que ésta funcione a nuestro favor, lo que hará que mejoremos notablemente cualquier aspecto que nos propongamos.
Quiero que sepas que convertirse en un campeón de cualquier deporte de contacto, va más allá de la exactitud de un movimiento ofensivo, de un movimiento de ataque o la técnica de defenderse. Significa seguridad, pensamientos claros y entendibles, poder dominar las voces internas negativas, la capacidad de retomar golpes exitosos del pasado, olvidarse de un mal movimiento y saber sobreponerse a ellos recuperando la concentración de la pelea. El mismo trabajo mental que hace un deportista de élite es el mismo trabajo mental que tú debes hacer para alcanzar grandes resultados, también en tu vida cotidiana.
Últimamente muchas cosas han cambiado en el deporte de contacto. El equipamiento de los gimnasios ha mejorado notablemente, la tecnología ha contribuido a desarrollar equipos de entrenamiento y de competición de gran nivel, las reglas se han modificado bastante y hasta la técnica del combate ha variado. Pero lo que no ha cambiado es el enfoque psicológico de los grandes luchadores desde el principio de los tiempos.
Todos ellos tienen muy claro cuales son sus metas, sus objetivos, reconocen el lugar donde se encuentran y donde quieren llegar, estableciendo para ello un plan de acción claro que les permita alcanzarlas (esto se puede aplicar a cualquier área de tu vida cotidiana y seguro que mejorarás).
Otro factor común que tienen este tipo de deportistas es que disfrutan de su trabajo, que fácil, les gusta y le pagan por ello, sin embargo los entrenamientos cuando pasa el tiempo se pueden volver repetitivos, exigentes, monótonos...,es ahí donde entra en juego la auto-motivación, encontrar dentro de ti ese toque especial que puedan hacerte disfrutar, poniéndote retos que te diviertan y darle un toque diferente a tus entrenamientos.
Otro aspecto importante es la capacidad de mantener nuestra mente concentrada y totalmente atenta a la ejecución de lo que estemos realizando, porque en tanto en cuanto lo hagamos conseguiremos dar lo mejor de nosotros mismos en cada cosa que hagamos. La concentración te hace mejor. Cuando estás concentrado clavas un clavo, cuando estás desconcentrado no sabes ni dónde poner el clavo. Una cosa que va bien es cambiar de tarea o actividad cada cierto tiempo para evitar la rutina y la monotonía.
De igual manera encontramos la reprogramación de la mente, esto significa la eliminación de creencias negativas donde el deportista no se siente capaz, no se siente merecedor o simplemente se siente por debajo de las capacidades de sus rivales, esa voz interior que nos dice ya no puedo más, para para..., esto hay que cambiarlo, hay que pensar en positivo, visualizando que vamos a lograr todos nuestros objetivos y podremos con todo porque cualquier persona puede llegar a conseguirlo, ¿por qué tú no?.
En el amor, en el trabajo, en tu profesión, en todo vas a encontrar competencia, y para sobresalir debes aceptar que otros tienen tus mismos intereses y que para ganar en lo que deseas simplemente debes ser el mejor y debes estar dispuesto a hacer sacrificios, en la medida que puedas, (hay que ser realista, las torres más altas no se han construido en dos días) y tener disciplina, para llevar a termino lo que has planeado para conseguir tus objetivos.
Todo lo anterior debe ir acompañado de seguridad y confianza en sí mimo, porque estoy seguro que TÚ eres capaz de hacer todo lo que te propongas.
Espero que este artículo te ayude a entender que tienes más capacidad de la que crees para controlar el estado de tu cerebro y de tus circunstancias.